Vacunar a los niños varones contra el virus del papiloma humano?
El virus del papiloma en hombres
El VPH es un virus muy frecuente tanto en hombres como en mujeres. Se estima que 3 de cada 4 personas sexualmente activas se infectarán por algún tipo de VPH a lo largo de la vida.
El cáncer de cuello uterino es la consecuencia más conocida de la infección por VPH, pero no es la única. Este virus también causa las verrugas genitales (también llamadas condilomas), y se ha relacionado con el cáncer de vulva, de vagina, de ano, de pene y de orofaringe (cáncer de garganta). Alrededor del 90% de las verrugas genitales están provocadas por los tipos de VPH 6 y 11, y la inmensa mayoría de los cánceres de ano, pene y orofaringe relacionados con el VPH están causados por el tipo 16. Estos tres tipos de VPH están incluidos, entre otros, en las dos vacunas aprobadas en hombres actualmente (vacuna tetravalente y la recientemente aprobada, nonavalente). Cabe destacar que el cáncer de ano es más frecuente en hombres que tienen sexo con hombres.
Estos cánceres no son tan frecuentes como el de cuello uterino en la mujer, pero los casos de cáncer de ano y de orofaringe relacionados con el VPH están aumentando de forma muy importante en algunos países. Por ejemplo, en Estados Unidos en los años 80, menos del 20% de los cánceres de orofaringe estaban relacionados con el VPH y ahora ya representan más del 70% de los casos. De hecho, si este aumento se mantiene, se espera que en el año 2020, los cánceres de la orofaringe vinculados al VPH sobrepasen a los casos de cáncer de cuello uterino.
Motivos para vacunar a los niños frente al VPH
El principal motivo para vacunar a los niños es la prevención de las enfermedades que ya hemos comentado:
Verrugas genitales
Cáncer de orofaringe
Cáncer de ano
Cáncer de pene
Como uno de los motivos para vacunar a los niños es la prevención de las verrugas genitales, se recomienda la vacuna tetravalente o la nonavalente, que son las que incluyen los tipos de VPH 6 y 11. Si bien con estas vacunas no evitaremos todos los casos de los cánceres mencionados ya que no todos se relacionan con el VPH, sí evitaremos una proporción sustancial.
Aparte del beneficio directo que supondría para los niños el vacunarles, también tenemos otros motivos para hacerlo:
Beneficio indirecto para las mujeres: La vacunación de los hombres permitiría reducir la propagación de la infección y esto beneficiaría también a las mujeres, que tendrían menos riesgo de infectarse por el VPH en sus contactos sexuales con hombres vacunados.
Interrupción de la circulación del virus: El vacunar solamente a la mitad de la población hace muy difícil que el virus deje de circular. Si vacunamos tanto a mujeres como a hombres, impediremos la circulación del VPH y con el tiempo sería posible su desaparición (erradicación).
Equidad: El vacunar a los niños promovería la equidad en salud, ya que actualmente se da una situación de desigualdad.